Lateral pivot shift test

Sirve para valorar la inestabilidad anterolateral de la rodilla por lesión del ligamento cruzado anterior (LCA). Es uno de los test más aceptados y utlizados en la actualidad.

• Material necesario: Una camilla de fisioterapia. Si la prueba se realiza en el suelo, necesitaremos disponer de una colchoneta o esterilla.

• Procedimiento: La maniobra de evaluación debe realizarse con el sujeto en posición decúbito supino (boca arriba), la cadera de la extremidad lesionada en posición neutra, la rodilla extendida y el talón fijo. El evaluador debe sujetar con una mano el cóndilo femoral externo colocándola a nivel de la parte superior de la tibia y el peroné y, con la otra mano, debe hacer una toma a nivel de maleolo externo y planta del pie. A partir de esta posición, se procede a realizar una abducción de cadera, una rotación interna de la pierna y un valgo de rodilla (ver ilustración).

• Evaluación: La prueba se considera anormal o positiva cuando el platillo tibial lateral se subluxa anteriormente y se clasifica con los siguientes valores según la gravedad: 1) Cuando existe sensación de deslizamiento 2 ) Cuando existe un clunk. El movimiento en el lado externo es más fácil de apreciar, pero en el lado interno es más difícil. 3) Indica gran choque femorotibial e indica rotura del LCA. Si no existe un movimiento anormal del platillo tibial sobre el fémur (subluxación), la prueba se considera normal o negativa.

• Observaciones: Esta prueba puede ser positiva tanto en la lesión aislada como combinada con estructuras laterales. Se debería tener en cuenta alguna lesión en otras estructuras, insuficiencia de la cintilla iliotibial, meniscos, artrosis, etc.