Hexagonal obstacle test

El objetivo principal de este test es medir la capacidad del sujeto para moverse rápidamente, saltando una serie de obstáculos, mientras mantiene el equilibrio. Esta prueba de agilidad demanda altos niveles de control, fuerza, potencia, propiocepción y coordinación.

• Material necesario: Una superficie plana antideslizante, 6 vallas y marcas para delimitar el recorrido del circuito, una cinta métrica y un cronómetro. Como puede verse en la ilustración, las vallas son de diferentes alturas: 1 valla de 25, 32 y 35 centímetros (cm) y 3 vallas de 20 cm.

• Procedimiento: Para la reliazación de esta prueba lo primero que debemos hacer es marcar un hexágono de 66 cm de lado, colocando las vallas de diferentes alturas tal y como puede observarse en la ilustración. El objetivo de este test es que el participante realice una serie de saltos de ida y vuelta con los 2 pies sobre los lados de un hexágono. Para comenzar el test, el sujeto deberá colocarse en el centro del hexágono, mirando hacia la línea A (durante toda la prueba). A la señal del evaluador, el sujeto inicia la prueba saltando sobre la línea B y regresando de nuevo al centro (siempre realizando 2 saltos), luego sobre la línea C, D, E, F y A, Cuando el sujeto salta sobre la línea A y regresa al medio se acaba una vuelta (B,C,D,E,F,A), siempre regresando al centro después de saltar hacia cada lado, de tal forma que una vuelta corresponde a un total de 12 saltos (6×2). El participante deberá completar 3 vueltas (36 saltos) y la prueba se dará por finalizada cuando el sujero salte desde la línea A hasta el centro una vez completada la tercera vuelta, momento en que se detendrá el cronómetro y anotaremos la marca alcanzada.

• Evaluación: Se mide en segundos (sg) y el sujeto dispone de un máximo de 3 intentos. En Fisicalcoach, podrás obtener la mejor marca, así como la media o la mediana.

• Observaciones: Este test tiene una variante en la que se utilizan conos en lugar de vallas, siendo todos los conos de la misma altura. También existe una prueba hexagonal sin obstáculos donde el sujeto solo deberá saltar las líneas dibujadas en el suelo. En sus inicios, este test fue creado para evaluar a esquiadores alpinos, siendo hoy en día una prueba muy utilizada en deportistas de múltiples modalidades.