El fútbol sala se practica entre dos equipos de cinco jugadores cada uno. Debido a su funcionalidad dinámica y variable, tiene características particulares. El juego se centra en el control del espacio y la tenencia del balón permanentemente. Cuando estableces la posesión del esférico como estrategia básica para marcar en el arco contrario, construyes un modelo de juego basado en la triangulación ofensiva.
La elección del sistema ofensivo para un equipo de fútbol sala depende de las características y habilidades de los jugadores que integran el equipo. Además, el juego ofensivo incluye la posesión del balón y las acciones para recuperarlo. Por tanto demanda tácticas colectivas, como la construcción del juego para llegar al marco rival y los posicionamientos para finalizar el trabajo ofensivo.
La aplicación para entrenadores de fútbol sala son de gran apoyo hoy en día para mejorar cada posición de las jugadas de fútbol sala.
¿Qué es el triángulo ofensivo?
Es la propuesta de ataque basada en la triangulación para romper la marca oponente. Se denomina triángulo para el jugador que posee el balón, ya que cuando pasa al frente forma un triángulo de tres jugadores.
Para conservar y asegurar la posesión del balón, tienes que mantener la comunicación mediante el pase y la movilidad constante de los jugadores. El apoyo, las líneas de pase y la apertura del espacio se dan por la distribución posicional. Precisamente, los triángulos permiten mantener el equilibrio en la ocupación y distribución de los jugadores en el área.
Asimismo, para avanzar hacia el arco contrario, debes aprovechar las fallas que presente el equipo defensivo contrario. Dichas problemas defensivos ofrecen opciones para filtrar el balón cerca del arco contrario, lo cual requiere también un apoyo ofensivo mediante la triangulación ofensiva.
La labor principal de la fase ofensiva es marcar goles. El remate a portería es una destreza técnica individual y su efectividad involucra factores como las posibilidades de circulación y movilidad del balón cerca del arco contrario.
Implementación del triángulo ofensivo de fútbol sala
El triángulo ofensivo de fútbol sala se implementa mediante constantes líneas de pase, asociaciones solidarias, ofensivas, movilidad como factor distractor para generar, dominar y utilizar los espacios, entre otras variables. No obstante, mantener un orden en la distribución posicional y funcional para conservar la circulación del balón y los triángulos, implica dos alternativas de pase para quien posee el balón.
La efectividad de la estrategia requiere que tengas un buen perfil, una distribución posicional adecuada, creatividad e iniciativa para resolver. Es decir, un conocimiento táctico que determine tu desempeño y por ende el desarrollo del juego. La táctica facilita la generación, ocupación y manejo del espacio. Pero, si el modelo ofensivo es automático y rígido en su movimiento, se realiza con menor eficacia.
Triángulos ofensivos dentro del ataque en el fútbol sala posicional 3-1
Los triángulos ofensivos se clasifican de dos tipos: en profundidad y en amplitud. El primero lo efectúa la figura del pívot. Mientras que el segundo involucra la zona de creación ala, cierre y pívot. Dentro del ataque posicional 3-1 sobresalen las 3 posiciones del pívot.
- Pívot centrado: ocupa el eje central imaginario del campo para generar espacios laterales de 1×1, dualidades en banda o cortes al espacio formado en banda.
- Pívot semi-centrado: se posiciona en el centro de uno de los lados, preferiblemente en lado de pierna dominante para trabajar conexiones con el pívot o generar el espacio en el otro lado para cualquier situación de 1×1 o dualidades en banda.
- Pívot en banda o falso pívot: actúa pegado en banda, participa en la creación del juego y crea espacios interiores para el trabajo de cortes.
Un factor relativo a la posición del pívot y los triángulos ofensivos es la acción directa e indirecta. Esta se basa en la forma de atacar el balón y el espacio a dominar. Las dualidades ofensivas reúnen 5 características significativas:
- Colocación en el campo: no es igual implementar dualidades en zona de creación que en la de finalización.
- Riesgos a tomar: implementar tácticas de ataque diferentes en cualquier posición del campo, admitir juego entre líneas cerca de la portería y trabajarlas.
- Tipo de defensa: las dualidades a usar para atacar una defensa zonal difieren a las de una defensa individual.
- Aplicación adecuada de los fundamentos individuales técnicos y tácticos.
- Toma de decisión: Aunque la toma de decisión es implícita en cualquier acción en el campo, en el trabajo de las dualidades se enfatiza con el objetivo de la dualidad: tener profundidad con una paralela o desbordar a un oponente en banda.
Por consiguiente, los diferentes triángulos ofensivos que se pueden trabajar en amplitud y profundidad en el ataque posicional 3-1 se resumen en:
- Triángulos entre líneas (amplitud y juego interior): acciones de juego entre alas, cierre y pívot, mediante cortes con o sin balón.
- Conexiones con el pívot: movimientos que haces entre ala, cierre y pívot que están relacionados con las acciones directas e indirectas.
- Movimientos de amplitud: implican los procedimientos tácticos patrón giro y patrón circular. Forman pasillos interiores y exteriores para conectar con el pívot.
- Sobrecargas en creación: promueven una acumulación de jugadores en línea de pase para crear dudas defensivas en los cambios frente a los posibles cortes ofensivos.